Del diálogo que sostuvieron Einstein y Poincaré y de cómo se resolvió
La matemática parece tener un doble estándar. Por un lado, están las disquisiciones teóricas, que a primera vista solo parecen tener importancia para nosotros, para los matemáticos, sin que tengan injerencia en el mundo real y, por otro lado, la matemática es una herramienta indiscutible para resolver todo tipo de problemas en ese mismo mundo real.
Hay un diálogo, una discusión célebre entre dos próceres de la ciencia: el físico Albert Einstein y el matemático Henri Poincaré. Una conversación en la que ponían énfasis en la eterna discusión entre la matemática y la física.
Henri Poincaré (1854 - 1912) |
Einstein: —¿Sabe usted, Henri?, al principio, yo estudiaba matemática. Pero lo dejé y me dediqué a la física…
Poincaré: —Ah… No lo sabía, Alberto. ¿Y por qué fue?
Einstein: —Bueno, lo que pasaba era que si bien yo podía darme cuenta de qué afirmaciones eran verdaderas y cuáles eran falsas, lo que no podía hacer era decidir cuáles eran las importantes….
Poincaré: —Es muy interesante lo que me dice, Alberto, porque, originalmente, yo me había dedicado a la física, pero me cambié al campo de la matemática…
Einstein: —Ah, sí ¿Y por qué?
Poincaré: —Porque si bien yo podía decidir cuáles de las afirmaciones eran importantes y separarlas de las triviales, mi problema… ¡es que nunca podía diferenciar las que eran ciertas!
Creo que por delicadeza Poincaré no le recordó a Einstein que sin las herramientas de la matemática, él nunca hubiera podido formular la teoría de la relatividad. Claro, es justo aclarar también que Einstein en sus últimos años reconoció sobradamente el papel fundamental que tuvo la matemática en la formulación de sus teorías.
Albert Einstein (1879 - 1955) |
No hay comentarios:
Publicar un comentario